A la vista
tenés todos los
colores de mi interés.
¿Alguna vez te
confesaron que el rocío
se perfuma de vos a
la tarde?
Tu piel es tan
suave
como el sueño que
te cierra los ojos.
El azul más
profundo, casualmente
se asemeja bastante
al sabor de tus labios.
Y si no me equivoco
somos igual que una poesía
de Girondo a las
tres de la mañana.
Al menos eso me
pareció
la última vez que
te amé.
No hay comentarios:
Publicar un comentario